Por Diana Cheng
La teoría de la justicia implica
dos aspectos de suma importancia: Los procedimientos justos y los resultados
justos. Sin embargo en empresas como GAP donde lo que se busca es maximizar la
rentabilidad y las ganancias para los accionistas, es casi imposible abarcar
estos 2 aspectos.
Primer problema: Los salarios extremadamente
bajos.
Después de las duras críticas
dirigidas a la empresa textil GAP, debido a la explotación de sus trabajadores,
se ha intentado mejorar sus condiciones de trabajo logrando que el entorno
laboral sea mucho más tolerable que antes. Sin embargo presentan, aún, un
problema muy grande: la disconformidad por el nivel remunerativo extremadamente
bajo. Las personas tienen derecho a mantener una vida digna, con lo
mínimo necesario para cubrir sus necesidades básicas; sin embargo los
trabajadores de GAP viven con un salario de 60 centavos por hora. Clara
explotación. Mientras que las utilidades de GAP, el año pasado, 877 millones de
dólares. Como se puede observar existe una distribución del dinero muy injusta,
y una clara vulneración a los derechos humanos. Una solución aplicable, con la
cual se estarían respetando los derechos de las personas, seria reasignar un
porcentaje de las ganancias (que no seria tan representativo para la empresa) y
aumentar los niveles salariales, para que de esta forma los trabajadores vivan
mejor y estén mas conformes con su trabajo. Este procedimiento justo, seria
complicado de ejecutar para una empresa como GAP debido a sus políticas de
maximización de rentabilidad.
Segundo problema: Condiciones infrahumanas que aún existen en
algunas fábricar.
Si bien es cierto, las condiciones laborales han
mejorado, todavía existen fabricas de GAP que mantienen a sus trabajadores en
situaciones de trabajo casi esclavizantes. Los trabajadores no pueden ir al
baño, trabajan mas de 12, no tienen permitido descansar, etc.
La
razón por la que los operarios no renuncian al trabajo es porque en sus países
no existen oportunidades laborales y deben aceptar lo que la empresa extranjera
proponga; además de firmar dentro de sus contratos clausulas de permanencia
que les impide salir de la empresa cuando lo requieran. Aquí se irrespeta
claramente el derecho a la libertad: estas personas viven y dependen por
completo de GAP, y los resultados son pobreza e inconformidad; que a su
vez resultan en saqueos, huelgas y robos que desfavorecen a la misma
empresa. Esto se podría solucionar con un cambio en la cultura organizacional
de la empresa, colocando personas de recursos humanos que supervisen el trato
que se les da a los trabajadores. Así mismo podrían hacerse auditorias
externas que supervisen el buen trato a los operarios y trabajadores en general
de las fábricas. Por otro lado el gobierno de los países donde opera textil GAP
debería interceder por sus ciudadanos y exigir a la empresa tratos justos,
horarios regulados y todos los beneficios que se deben otorgar.
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